¿Sabías que la razón por la que te quejas tiene mucho que ver con tu lenguaje del amor? La semana pasada escribí cerca de la importancia de estos 5 lenguajes para tener mejores relaciones interpersonales. ¡Aquí, otra razón para aprender más de ellos!
Nos quejamos cuando sentimos que aquello que más valoramos está siendo desatendido.
Si te quejas porque la visita de esa persona que amas fue muy corta, nos da un fuerte indicio sobre tu lenguaje del amor llamado tiempo de calidad.
Si dices que "la navidad era mejor de niño, pues recibía más regalos", nos indica que para ti, una manera clave en la que te gusta que te expresen amor es a través de regalos.
Si te sientes abandonado por las personas que te quieren pero que no te brindan ayuda en momentos difíciles, indica lo valioso que es para ti un acto de servicio.
¿Significa esto que eres mejor o peor persona? ¡No! Simplemente significa que somos diferentes. Ahora, lo importante es que le DIGAS a la gente que tienes cerca, a la gente que amas... lo que es valioso para ti.
Hemos crecido con una creencia errónea de "Si me quisieras, sabrías lo que quiero". Lo sé, pasa más en mujeres que en hombres. Pero, es solamente una programación limitante que nos han enseñado, y que hay que reevaluar, pues estamos mirando a los demás a través de unos lentes que distorsionan la realidad.
Los lenguajes del amor son cinco, así que miremos los dos que faltan. Revisa si te quejas por falta de apoyo verbal en casa, en tu relación. Muchas veces la persona, con la mejor de las intenciones, nos puede decir, "Todo va a estar bien, no te preocupes". Puede ser que esto esté bien para ti, o que falte algo.
A veces, más que una palabra, puedes querer una conversación de corazón y sin máscaras. Una conversación donde te sientas escuchado y no juzgado. Una donde puedas decir lo que ocurre, y que no te respondan: "Te lo dije".
Si eso te ocurre, saber trabajar con los cinco lenguajes del amor es 1) saber decir "necesito que hablemos un rato", y 2) saber que hay personas que te harán ese regalo y otros no... sin que llegues a la conclusión que no te quieren o que no eres importante para ellos.
El quinto lenguaje es el toque físico. Las personas que tienen este lenguaje, literal sienten que "se desboronan" o se sienten "fraccionados" si no han recibido afecto físico (que no tiene nada que ver con sexo) y que necesitan un abrazo para volver a pegar los pedacitos.
Y bien, está en tus manos.
Está en tus manos decir a las personas que son importantes para ti, el tipo de afecto que más necesitas y deseas recibir.
Está en tus manos brindar (o no) a las personas que amas ese lenguaje que te están solicitando.
Está en tus manos, soltar. Soltar la necesidad de que solamente si te expresa amor como a ti te gusta, solamente así te vas a sentir amado o amada. Es un gran acto de amor contigo soltar. Expresa cuál es tu preferencia, y suelta. Igualmente valora si tu pareja te dio un regalo, aunque no te diga "Te amo" o te dé un abrazo.
Presta atención a las quejas propias y de los demás. Somos un libro abierto, cuando sabemos leer. En vez de pensar "¡Ah, qué intenso!" o "¡Cómo molesta!", puedes aprender a hablar su propio lenguaje. Verás cómo se transforma la relación.
Presta especial atención al lenguaje de los niños. Por la edad, van a ser muy de afecto físico. Sin embargo, que les des tu tiempo (sin el celular en la mano o sin estar preparando la cena) es fundamental para que crezcan con la percepción de lo VALIOSOS que son.
Es tu mejor inversión: expresarles lo valiosos que son en un lenguaje que ellos comprendan realmente.
Hace un par de años, en un programa de radio, una oyente me preguntó "qué hacer para que su hijo adolescente se aleje de la droga". Admito que mi respuesta ese día no fue honesta. No quería sonar cruel y decirle (la verdad) sobre lo tarde era para hacerse la pregunta. El momento ideal para prevenir drogadicción es desde que son pequeños, con la calidad de atención y diálogo que se establece con ellos, y el respeto (versus la imposición) que se fomenta en la relación.
Para efectos de este artículo, si desde pequeños, nuestros hijos se sienten valorados, amados y se sienten respetados en su integridad (respetados como son, no sólo cuando hacen lo que los papás quieren)... es una excelente manera de construir un ser que tomará mejores decisiones en su vida.
¿Y nuestras quejas? Justamente ahí se originan. En esas carencias que tenemos de niños. Nuevamente: está en tus manos, darte a ti mismo - y solicitar - el afecto de deseas y mereces.
Me despido hoy con un gran abrazo :)
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