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Contacto visual: mito y realidad

Actualizado: 23 feb 2020

Mucho se dice sobre hacer contacto visual con la audiencia. Sin embargo, seas principiante o ya nivel experto en hablar en público, dos cosas a tener en cuenta:

1. Hay mucho que desaprender

2. Al mirar a la audiencia a los ojos... esteeee... se tiende a olvidar lo que querías decir.


Desaprender. Identifica cuál de estas has escuchado:

  • No mires a nadie directamente. A lo Buzz Lightyear, "Al infinito y más allá".

  • Imagínate a las personas en ropa interior (y otras estrategias perversas que no me atrevo a mencionar).

  • Mira a una persona que te sonría y enfócate solamente en ella. Ignora al resto.

Ninguna de estas son efectivas. Hay que desaprenderlas. Mejor conectar con tu público.


Ahora, mirar a los ojos ¿hace que se olvide lo que vas a decir? Solo al inicio. Pero eso es como caminar. Entre más lo practiques, se vuelve hábito, fácil de hacer sin distraerte.


A re-aprender, entonces.

1. El objetivo al tener la audiencia en frente es conectar con esas personas.

Cuando no conectamos es que vienen de la audiencia los ojos vidriosos, la mirada perdida y esa cara de "Ya va a terminar?" No hacer contacto visual implica una lista de ofensas: te captan como una persona que no es sincera, desinteresada, desapegada, insegura, falsa e incluso, arrogante.

Aplica el viejo dicho: ni muy, muy; ni tan, tan. Mirar a alguien fijamente, más tiempo del necesario, también desconecta, asusta, intimida.


Revisa cómo miras cuando estás conversando con amigos, contando una anécdota de algo que te ocurrió. A veces les miras a los ojos (¿unos 2 segundos?). En otros momentos te sumerges en su historia, reviviéndola... y vuelves a conectar. Garantiza, mira a las diferentes personas de tu audiencia - no únicamente a una pobre alma desprotegida.


2. Si sientes que "pierdes el hilo" de lo que vas a decir, le recomiendo tres lugares a mirar:

  • Arriba, unos segundos, para encontrar las imágenes de lo que quieres decir

  • Abajo a tu derecha, si quieres conectar con la emoción de lo que estabas diciendo

  • Abajo a tu izquierda, si deseas recordar las palabras exactas que quieres decir.(Recuerda que esto mismo puede ocurrir con alguien que habla contigo. Si te quitan la mirada mientras hablan, no necesariamente quiere decir que están mintiendo o que no puedes confiar en esa persona... solo están recordando.)


3. ¿Qué ritmo seguir? Observemos la naturaleza. Las olas del mar. Los ciclos de la luna y la vida. Nada es estático, nada es fijo. Así la mirada: conectar con unas personas... luego con tu tema... quizás una diapositiva... luego otras personas y verifica que estén conectadas, que te estén escuchando.


De algo estoy segura: ya lo sabes hacer.

Ya has practicado contacto visual en conversaciones entre amigos y colegas con los que te sientes a gusto. El programa ya está instalado en tu cerebro. Ahora, es cuestión de trasladar ese hábito natural a tus presentaciones.


Estar relajado también ayuda. Respiiira. 

(Tema de otro artículo:)


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